LA ASOCIACION atajo, preconizado en el maifiesto, no lo viraos por parte alguna. Seguimos por caminos trillados y lentos. El final, visto el desenvolvimiento de las sesiones, era previsto. La corrección exquisita de D. Antonio Miguel, se impuro a toda razón y cantando aquello y de lo dicho no hay nada, abrazó al Presidente que cesa¬ ba, entre los aplausos del coro. En el próximo número, analizaremos la actuación de Salamanca, una de las más interesantes, ya que su representante el Sr. Crespo, era miembro dimisionario de la Comisión segunda. X. Mh Mm\ í! Mim i\ Mm Mm En la sesión de clausura de esta Asamblea, fueron entregadas al Director general de Primera Enseñanza las siguientes conclusiones: Quh cada maestro do tenga más de cincuenta alumnos, a fio da que la easpüaoza aea todo )o práctica y eficaz que es d« desear. Que se creen nuevas escuelas, para lo cual el Estado debe dedicar Ua cantidades nece Sirias, aunque sea p^elsp disminuir ot^os gastos de los presupuestos. Declarar iasignifieante ni nÚTiero de inspectores existentes en la actualidad, toda vr z que si la inspencción ha de d ir el resultado apetecido, cada uno de ellos no d^be tener a su cargo más de c\on escuelas. Procurar se dedique a ía escuela rural toda la atención qu < r^q itere y merece tan interesante aspecto de la enseñanza. M prar ios 8Í9tern*3 da enseñanza, hacién dola menos maemotóeníca, más práctica. Reconocer la naeosidad d \ construir veinticinco mil escuelas, lo cuil supone para el Estado un gasto de doscientos cincuenta millones de pesetas. Al efecto, éste deba dar fa cilidad^ s a los nyuntatniemos para la cons trucción da dich-js escuelas, dedicando durante diez años veinticinco millones anuales para subvencionar a aquéllas. Hacer efectivo el certificado de primera enseñanza. Crear la iqspacción módico- escolar. Defender el idioma español fuera de las fronteras de España. Hacer efectivo el derecho del niño a educación integral. Reformar las escuelas normales de moda que los estudios caatribuyan a la mayor cultura científica d^l maestro. Que el sueldo mínimo de éstos sea de 4.000 pesetas» pudiendo llegar hasta 15.000, como en los demás cargos dependientes del Estado. Adherirse a la petición de !a medalla de oro del Trab^p a favor del maestro de la provincia de Bireelona D. Manual Borràs. Adherirse asioaiacao al homenaje quH les maestros van a dedicar a D. Jacinto Bsnaven . te, y tara^ióa a la petición d^l premio Nobel de literatura a f ivor del Sr. Menéndez Pidal. Estimando que los traslados han sido un procedimiento arbitrario que altera y perjudica los servicios, se pide que los inspectores así trasladados vueWan a sus primitivos destinos, y los nombrados extrarreglamentaríamento renuncien a su nombramiento, satisfaciendo el Estado ios gastos qua esto ocasione, o en au defecto, qua los satisfaga la misma Asociación d.i Inspector* s, y que a la primera reunión de Cortes se llevi na proyecto de ley restableciendo la inamovilidad, y por último, que el sueldo mínimo de ingreso en el escalafón sea de 6.000 pesetas. Aprobadas las conclusiones, el director general manifestó que desde luego aceptaba por su parte varias de Us conclusiones de los inspectores. Dijo que en una cuestión tan complej* como ésta no se puade resolver de pronto; pero qu ¡ en el ánimo del ministro está el llevar r ápidamente a la realidad las peticiones de carácter doctrinal, creación de escuelas, número de inspectores, medios de enseñanza, inspección médicoescolar, interven ción de los inspectores en los diversos organismos, etc.