Asociación REVISTA DE PRIMERA ENSEÑANZA to$ÍocLcl¿ Y órgano dol J^f agistsWo de la provincia DIRECCIÓN Y ADMINISTRACIÓN Avenida de Zaragoza, número 6. De los trabajos que se publiquen seián resposables sus autores.— No se devuelven los originales. M PUBLICACION SEMANAL ü Toda la correspondencia, a la Dirección Avenida de Zaragoza, núm. 6 Anuncios a precios convencionales. Ano XXIII I Teruel 25 de Septiembre de 1955 | Núm. 1090 i ron Circulan con insistencia rumores de que se proyecta someter la labor del Magisterio al control de una Inspección especial a pretexto de evitar la educación tendenciosa que algunos Maestros realizan en la Escuela. El asunto entraña tal gravedad por su generalización que, la Asociación Nacional del Magisterio Primario se cree en el deber de emitir su opinión contraria a tales propósitos Si es verdad — que lo dudamos — que existen Maestros que hacen una labor de disolución social en sus Escuelas, guiando a la infancia por caminos equivocados, sanciónese su conducta, que medios legales tiene el Estado para ello, sin necesidad de recurrirá medidas excepcionales. Al Magisterio no le asusta esa «inspección especia» que reiteradamente se le pide; porque como clase tiene tal honradez de conducta, que estamos seguros no se mueve fuera de la órbita de, la ley que el Estado pone en sus manos. Lo que sí nos atemoriza es que llegara un día en que el Maestro viera mermada su autoridad ante sus alumnos, porque ello supondría recuerdo de aquellos Delegados gubernativos de la Dictadura y de las coacciones que ejercieron para que la escuela se pusiera al servicio de una política partidista, que no podemos silenciar los rumores que circulan, y al mismo tiempo, advertir que, en el fondo, se trata de un ataque a la Escuela nacional. La Escuela y el Maestro, en su sagrada misión, viven ajenos, por completo a las lu¬ chas sociales y políticas. Y si de ello se tuviera la menor duda, la medida más eficaz sería colocar al Magisterio al mismo nivel económico que tienen los demás funcionarios. Todo lo demás no será más que entorpecer la labor de paz social que a esta institución nacional incumbe, y llevar las pasiones de los hombres allí donde sólo debe reinar la alegría y la paz. El interés nacional exige que la Escuela Nacional sea de todos y para todos, y cualquier medida que pueda alterar estos principios la consideramos perniciosa. Cuando los Maestros no tengan más preocupaciones que las profesionales, cuando todos los niños tengan asiento en la Escuela y toda la juventud trabajo, se habrá realizado la mejor obra en defensa del orden social. El problema, a nuestro juicio, no es de policía, sino de educación y trabajo. «Escuela y despensa», que dijo Costa. — A. L. Casero, Presidente; M. Carnero, Tesorero; /. M. España, Secretario. Sección AJminisfraÜva Je Primera enseñanza Je Teruel En cumplimiento de lo dispuesto por los decretos de 15, 22 y 27 de diciembre de 1924 («Gaceta» del 15, 22 y 29, respectivamente) y orden de 24 de enero último («Gaceta» de 9 de febrero siguiente), esta Sección anuncia para su provisión en propiedad por los turnos que a continuación se expresan, las siguientes Escuelas vacantes: Para Maestras. — Por concursillo, trasla-