EL PUEBLO gún escriben-.,. .porque disponemos de la influencia de nuestro diputado... ¡Valientes concejales nos han caído! POLITICA PROVINCIAL La Comisión permanente de la Diputación de Teruel, con fecha 29, ha dictado resolución en el asunto de las protestas electorales formuladas por ios electores de este término municipal, D. Martín Celma y U. Leopoldo Asensio. Como era de esperar, esa resolución ha sido favorable a los intereses políticos de los andradistas, pero se ha apartado de las normas legales y hasta de las normas de la corrección. Y dispensen nuestra franqueza los celosos representantes de la provincia. Los dignísimos y cultos diputados que forman la Comisión permanente han querido dar a nuestros amigos una lección de procedimiento administrativo, y a fe que pueden hacerlo si en esta cómo en otras.cuestiones políticas se inspiran en .el sabio catedrático de Valladolid y en el competente gobernador de Barcelona. Y; no solamente han querido darnos una lección, sjno que la han dado en distinto sentido del por ellos intentado, y nosotros y nuestros amigos hemos decidido tomarla. Hoy, gracias a los elementos que componen la Comisión, podemos decir que la política de Teruel y su provincia nos es familiar, no por el trato, sino porque a fondo la conocemos. Tuvimos intención de hacer honor a los considerandos de la Comisión, pero desistimos de ello, porque hay cosas y hay elementos contra los que no es posible ir de frente. Nuestros amigos, seguirán el trámite y llegarán hasta el Miaisterio de la Gobernación, donde no informan resoluciones ni D. Rafael Andrade ni D. Antonio Royo Villanova, DOMINGO BñLLONQfl SASTRE CONFECCIÓN DE TRAJES A LA MEDIDA Calle Mayor, núm. 35-flLCflÑIZ Cuento de Reyes 1 Manolito era el pequeñín de la casa. Siete anos. Su hermana Rosalía le llevaba otros siete. Manolito era su juguete. El juguete de todos. Manolito cuenta los días que faltan para que llegue el de Reyes. Ya les ha escrito una carta esmerándose todo lo posible, procurando que escaseen los borrones y las faltas de ortografía, y ahora espera impaciente a ver cómo los Reyes cumplen. Es verdad que, en el colegio, otros niños le dicen que los Reyes son mentira; que los Reyes son los padres... Pero él no lo cree. Y su hermana Rosalía le ayuda a desechar la naciente duda. Esos niños son unos envidiosos. Todo lo que dicen es por envidia, porque son mayores y los Reyes sólo traen juguetes para los niños pequeños. — Entonces, ¿tampoco te traerán, nada a ti este año? . — Tampoco... 11 Y es que Rosalía parece mayor de lo que es. Muy desarrollada y además, muy guapa. Desenvuelta, no digamos; va por . la calle presumiendo como una pollita. Los chicos se vuelven y a veces le regalan los oídos con piropos que ella agradece sonriendo. El otro día la siguió un cadete, primo suyo, que acaba de ingresar en la Academia y ahora está aquí. de vacaciones. . i J. , :: ; :-\ . ; ■ Si se decidiera...' ^ : - • . 1 Un novio,., [y cadete! Rosalía sonríe ya ante esa esperanza, mucho más halagüeña que la que hace batir palman de . contentó a su hermano Manolito. ' ' ! < • lll , La noche de Reyes, nada más cenar se acuesta MariáíitohSu mamá lo arropadlo besa en la frente y Te dice, al oído, al tiempo de salir: : , — A d-órmir, a dormir, que si no los Reyes no se atreverán á subir al 'balcón... Y sale apagando la lüz, Rosalía también se ha retirado a su cuarto. Las muchachas ríen, mientras friegan, en la cóciña lejana. Poco a poco va el silencio enseñoreándose de la casa... Suena un reloj y sus huecas campanadas parecen retumbar en la sombra callada. Fuera, en las torres, unas campanadas se responden a otras. Cuando callan, vuelve el silencio. En el frío de la noche, las calles están también . desiertas y silenciosas. IV .Manolito no duerme. No puede dormir. El insomnio lo mantiene despierto. Sólo piensa en los Reyes... Oye un reloj, pero no puede contar las campanadas. -¿Serán las doce ya...? Si habrán venido los Reyes... No pudiendo dominar su impaciencia, se echa al suelo y, despacito, se dirige ai balcón, mirando a través de los cristales. ■■ ": , ■ En el amplio balcón corrido hay alguien. Manolito la conoce en seguida. Es su hermana. La luz de su cuarto, cuyo balcón ha dejado abierto, la ilumina. (jCon quién habla? Inclinada sobre la barandilla parece va a caer a la calle. . .. ¿Coa quién habla? Con los Reyes quizás... , Manolito va de sorpresa en sorpresa, , Ahora su hermana echa un braviante a la calle. Queda éste rígido como si a su extremo hubiera atado algo. Rosalía tira hacia sí y comienza a recoger el hilo... ¿Qué será...?. ¿Habrán olvidado quizá los Reyes sus escalas de seda y les ayudará su hermana a subirlos juguetes? En su impaciente curiosidad, alarga la cabeza y da con la frente en el cristal. A su ruido, vuelve