fare , la bondad y malicia de sus acciones, la fuerza de sus pasiones , y la naturaleza de los vicios que debe huir, y de las virtudes que ha de practicar ; oficios todos pro» pios de una verdadera Filosofia moral : no pueden conocerse sin el delicado arte de la crítica , que consiste en juzgar de las cosas rectamente: las leyes , en fin , no pueden conocerse sin haber llegado à conocer el arte divino de hacerlas. ¡Y que no me permita el tiempo , para confirmación de estas verdades , poner à