L·A ASOCIACION KOIOAIOO- sentimiento y de la idea. No se nos objete con con la prensa actual, así de provincias como de Madrid, porque sobre ser aquella eminente mente informativa y comercial, no puede bastar páh satisfacer las necesidades del Magisterio. Nuestra personalidad colectiva no ha de Venir, contrahecha e impura, facturada a gran velocidad de las antesalas ministeriales y de los mostradores del centro a las provincias; ha de ser en éstas donde se forme y tome carne, donde se inspire y nutra, donde se imponga y rnande; su espíritu, su cuerpo, su acción han de plasmarse en sus propios, genuinos y totales organismos societarios. Decimos que la prensa que ha de nacer ha de defender los intereses de la clase; y ha de hacerlo contra toda rutina, contra toda Vanidad, contra todo ilegítimo interés, contra todo evento. {Cancluird). REMITIDO Sr. Director de La Asóciaotón. Teruel 4 de enero de 1921 Mi buen amigo y compañero: Me sorprende Vd. y me anonada con su moción al Excelentísimo Ayuntamiento de esta capital, inserta en lugar preferente de nuestro estimable periódico La Asociaciók. correspondiente al l.e del actual,, que en este momento llega a mis manos; lo primero por no haber tenido la menor noticia previa de sus propósitos, que, todo aparte, agradezco profundamente porque los creo sinceros, aunque su manifestación me ha molestado mucho, y ío segundo, porque, aán suponiendo, y es mucho suponer, que mis servicios, como maestro de Teruel, hubieran sido realmente extraordinarios, he manifestado más de una vez y de muchos modos, que los considero hace tiempo por convenientemente saldados. Hablando, según mi costumbre, exabundancia cordis, declaro que, suponiendo a los Ayun tamientos facultados para Variar a su antojo los nombres de sus escuelas públicas, no me parecería mal Ver designada la graduada de Teruel con el de un maestro benemérito imitando lo hecho en Zaragoza, pero me opondría en absoluto, y del modo más eficaz que pudiera y su piera, a que ese nombre fuese el mío humildísimo, principalmente porque, antes que yo, han ejercido la primera enseñanza pública en Te¬ ruel maestros inteligentes y meritísimos, descollando mucho el primer Regente de la Escuela Práctica d« esta Normal, D. Pedro Pablo Vi cente y Monzón, mi querido y malogrado maes tro. para cuyo elogio basta con decir que uno de sus compañeros, D.Pedro Antonio Ibáñez, hombre de muy recta conciencia y amor ai trabajo, decía ,de él con gran ingenuidad que le cabían en la cabeza cuatro cientos muchachas/ y creo que no cabe mayor elogio, dadas las corrientes de la pedagogia española de aquellos tiempos. El Sr. Vicente, a quien recuerdan todavía con respeto y Veneración sus discípulos vivientes, sirvió muchos años con verdadero provecho la antigua Escuela práctica de la que fué el primer maestro, habiéndola renunciado para posesionarse del elevado cargo de Diputado a Cortes por esta provincia, del cual, y aunque no venga al caso decirlo, sacó solamente muchos sinsabores y tal vez una muerte prematura. Sumando, pues, mi ruego al de Vd.; suplico con el mayor encarecimiento a la Excma. Corporación municipal que si está en sus atribuciones, y considera digna de tomarse en cuenta la citada moción, sea designada la escuela graduada aneja a la Normal de maestros de esta provincia con el meritisimo nombre de D. Pedro Pablo Vicente. Por si las circunstancias alegadas por al señor Pérez alcanzaran a hacer algún peso en el ánimo de los señores Concejales, desde luego declaro que me opondría con todas mis fuerzas y con todos los medios a mi alcance, a la realización del pretendido acuerdo. Además no fué sólo el Sr. Vicente maestro preclaro de Teruel; antes que él se distinguió por su método y procedimientos especiales el creador de esta escuela oficial de párvulos don Desideri© Lázaro y no le fueron en zaga sus sucesores Campos, Mateo y Lozano todos de feliz memoria, así como también mi antecesor en la Regencia, D. José González. Esperando verse complacido con la inserción de estas líneas en La Asocíacion, le anticipa las gracias y se repite a sus órdenes su buen amigo, compañero y antiguo maestro, Miguel Valles.