Por un. razonamiento matemático se ka llegado a deducir que un aumento de ochocientos veintiún metros en el espesor de las capas atmosféricas, tal como se da en las planicies de poca altitud, disminuye una millonésima de milímetro la longitud de onda en las radiaciones ultravioletas, (Jue son las radiaciones del espectro solar c(ue encierran más excitaciones vitales. Es decir, que por el menor espesor oe capas atmosféricas en la Montaña (Jue en los llanos de poca altitud, el sujeto, colocado en la primera, recite mayor número de radiaciones ultravioletas, de radiaciones vivificadoras. De estas radiaciones participan aun las células más profundas de nuestro organismo, a favor de la penetración c(ue liacen todos los rayos solares a través de nuestros tejidos. Margat en Niza y Wintmer, tan conseguido impresionar una placa fotográfica a través del tórax Humano. Sería prolijo atondar en estos tectos científicos, tratándose de un artículo de divulgación, como éste; pero, repitiendo la consabida frase, la Naturaleza es muy safcia, diremos c[ue ésta dispone del pigmento melánico de la piel para transformar los rayos solares ultrarojos, dañinos y esterilizadores, en ultravioletas vivificadores y beneficiosos para el Komibre, Hemos intentado repetidamente la preparación de nuestros enfermos al tratamiento por el sol, antes de someterlos a la Helioterapía, en la ciudad de Zaragoza. El intento se dirigía a formar pigmento melánico en la piel, que kaBía de protegerles de los rayos quemadores ultrarojos. Pero siempre, sobre todo en verano, esta preparación intentada en Zaragoza kabía que suspenderla porque se presentaban quemaduras en la piel, accesos febriles, focos congestivos internos, antes que apareciese el pigmento de la piel. Tales resultados, obstrucionistas de la Helioterapía, no se dan en la Montaña, donde automáticamente los¿enfer- mos y los sanos expuestos a los rayos solares, van adquiriendo el pigmento melánico sin complicaciones. Hemos visto en Leysin los sujetos tostados, ennegrecidos, que soportan seis y ocko koras seguidas el sol sobre la superficie del cuerpo, completamente desnudo y sin sufrir accidentes. Y como derivación de este acomodamiento a los rayos solares, un aumento en el número de inspiraciones, un endurecimiento de sus músculos y una falta absoluta de sudor que tanto debilita y aplana a los que viven en las planicies. Es verdad que también en la playa, apesar de su falta de altitud, encontramos recursos para enderezar los retoños kumanos que se kan torcido y para restaurar los desperfectos de organismos ya desarrollados. Pero, la playa no ofrece las facilidades que la Montaña ni se muestra tan - eficaz como ésta; la kumedad atmosférica, la violencia de los vientos, la niebla invernal y los rápidos y brutales cambios atmosféricos del invierno, kacen que la playa sea utilizable muy pocos meses del año. La Montaña puede usarse en beneficio de los pacientes todo el año; en el invierno, la falta de viento, la igualdad de la temperatura, la reflexión de los rayos solares sobre la nieve, son otros tantos factores en pro de la Helioterapía. Hemos visitado en España los sanatorios marítimos de Gorliz, Pedresa, Coruña, La Toja; en Francia, los de Ondarraiz y Berck-sur-Mer; en Italia, El Lido; en Bélgica, Ostende: los Sanatorios de Montaña en Suiza, Leysin y Davos; en Alemania, Sant Blasien. De la comparación que kemos kecko entre unos y otros, siempre kemos preferido los de Montaña para los enfermos de tuberculosis quirúrgica. Hace años, que movidos por las excelencias de la Montaña en la Terapéutica de la tuberculosis quirúrgica y también por nuestro amor regionalista» planeamos la instalación de un Sanatorio para esta clase de enfermedades, en el Pirineo Aragonés. Enviamos un distinguido arquitecto a Suiza para estudiar aquellos Sanatorios; poseemos los planos del edificio y el presupuesto de una Sociedad Anónima. Pero, todo ello yace en el arekivo de las ilusiones perdidas. No desconfiamos en verlo realizado por jóvenes de iniciativas y de tiempo libre, pues el Pirineo Aragonés tiene condiciones mejores que el Pirineo Francés para esta clase de sanatorios y tan buenas como los Alpes Suizos. Al Sindicato de Iniciativa y Propaganda de Aragón, que nos ka tirado de la pluma en esta ocasión 166