Zaragoza, Julio - Agosto - Septiembre, 1948. V Año XXIV.- Núm. 208. ÍMM VESCAcJ RVEL4 REVISTA GRAFICA DE CULTURA ARAGONESA Director: Victoriano Navarro González. Dirección y Admón.: Plaza Sas, 7, bajo. TURISMO Y DIVISAS SIEMPRE hemos mantenido el criterio de que el Turismo, eficientemente dirigido, puede ser fuente insospechada productora de divisas; pero para que ello sea una realidad, es absolutamente indispensable que el cambio de la moneda turística sea atractivo para el visitante y en relación al que rija en otros países competidores, sin cuya premisa será estéril cuanto hagamos por propagar la excelencia de nuestro clima, las bellezas de nuestros paisajes, los tesoros de arte que poseemos, nuestra organización receptiva, nuestra cultura hispánica y la emoción de nuestros espectáculos. Al turista de hoy le agrada conocer cuanto indicamos, pero se ha vuelto también financiero y le gusta sacar partido de su divisa en forma discreta, inclinándose por aquellas zonas o países en donde su moneda tiene apreciación y ponen menos trabas a sus movimientos. Es plausible el esfuerzo realizado por las autoridades controladoras de la moneda de nuestro pais para conseguir el mayor ingreso posible de capitales procedentes del extranjero. A estos efectos se han producido una serie de medidas legislativas sumamente interesantes, entre las que destacan los cien millones de dólares en bonos del Tesoro y el régimen español para el cambio de divisas fecha 1.° de marzo del año actual con la modificación del día 16 de mayo del mismo año, pero esto hay que mejorarlo y Vista general del Moncayo, paraje de gran interés turístico. (Foto Rodríguez Aramendía). muy singularmente estudiar el tipo del dólar, libra esterlina, francos suizos y pesos, llamados «turísticos», a fin de que entren directamente por el Instituto Nacional de Moneda Extranjera, en vez de que sean convertidos en la bolsa libre de Tánger, Una revisión mensual o por lo menos periódica, como se efectúa en aduanas con el valor de la peseta oro para el pago de los derechos arancelarios, podía ser la solución de este interesante extremo. Precisamos fertilizantes, materias primas exóticas como el algodón y otras de muy variada condición; aprovechemos las circunstancias que vivimos y logremos que una gran masa de turistas de todos los continentes visiten nuestro país, y al mismo tiempo que nos conozcan y aprecien la era de prosperidad que brinda España, nos aporten ingentes cantidades de divisas que, trocadas en pesetas, harán marchar en forma esplendorosa este engranaje de industrias que, cual «industria madre», es el Turismo. Zaragoza, Septiembre de 1948. Eduardo Cativiela Presidente del S. I. P. A. 51