el ro/deG No aceptamos la comedia En contra de lo publicado en el número 309 de ANDALAN, el Mixto n.0 1 de Zaragoza no es el único Instituto donde existen profesores que han decidido no recuperar las clases perdidas en la pasada huelga. La recuperación se caracteriza por: 1. °) Clases voluntarias para el alumno (en contraste con el habitual control de asistencias y retrasos que existen en las clases normales). 2. °) La materia impartida no debe ser objeto de evaluación. 3. °) En centros rurales como el nuestro, por ser materialmente imposible recargar más el horario de alumnos que se desplazan 20 ó 30 kms. diariamente, y ser poco atrayente hacerlo en sábados, parte de las recuperaciones se harán en junio, cuando hayan terminado las clases e incluso las evaluaciones. Todo indica que se trata de recuperar el dinero descontado en una huelga salarial y de oscuro desarrollo, y no de recuperar las clases. Los abajo firmantes no hemos aceptado tal comedia, digno montaje del Ministerio y de las Asociaciones de Catedráticos y Agregados. Lástima que sólo representemos el 20 % de los profesores que hicieron la huelga, pues todos los demás recuperan. Carlos Alvarez y José Ramón Giménez. (Profesores agregados del I. B. «José M. Albareda», Caspe.) La Casa de Aragón es de todos Nos referimos a la alusión a la Casa de Aragón en Madrid, en el número 310 de ANDALAN, párrafos finales de «Aragón en el recuerdo», firmado por A. M. J. E. L. Sin ánimo de entrar en polé¬ mica, sí hemos de rechazar rotundamente algunas afirmaciones de dicho firmante. No sabemos de ningún intento suyo normal (dirigido a esta Directiva) para «organizar» algo. Y sí que colocamos y difundimos carteles de las actividades culturales a celebrar en el Colegio Mayor «San Juan Evangelista». Y nos consta, por la asistencia de asociados nuestros, de su interés, profundidad y éxito difusor de las problemáticas de nuestro querido Aragón. Se cae por su base, pues, la afirmación gratuita del firmante de que «allí, en la Casa de Aragón, no son nada proclives a esta clase de actividades». Somos mil socios y los hay «proclives» menos, más, poco, mucho o nada, a estas actividades u otras: juego, tertulia, lectura, bar, festivales, etc. Nuestra casa, sin presunciones intelectuales y escasos medios, convoca con no poca frecuencia actos tan variados como éstos: conferencias, recitales, concursos y exposiciones, representaciones del Cuadro 5^ de lo/ viEmro/ Colonias, Viajes y Vacaciones Familiares Semana Santa - 81 AUTOCAR del 15-4 al 21-4 París Amsterdam Portugal Venècia Florencia Marruecos Ruta Transahariana Londres del 15-4 al 21-4 del 15-4 al 21-4 del 11-4 al 20-4 del 15-4 al 21-4 del 15-4 ai 21-4 BUNGALOW HOTEL HOTEL CAMPING HOTEL CAMPING del 11-4 al 21-4 avión 13-4 y 17-4 del 13-4 al 19-4 10.200 13.050 6.900 10.650 15.400 13.750 9.650 19.950 15.500 19.300 18.300 24.150 INFORMACION E INSCRIPCIONES: Laguna de Rins, 8, 1.° der. Tel. 23Ó805 - ZARAGOZA Organización Técnica: miIflDO Efl HUTA GAT n.0 600 Escénico y Cuadro de Jota, homenajes y evocaciones a aragoneses ilustres, colaboración con Fitur-8I, etc. Y asisten los que quieren y pueden. Nunca todos, pero siempre algunos. Finalmente, si no nos dieron a conocer «su programa», mal podíamos negarnos a aportarles colaboración alguna. Y una puntualización: La Casa de Aragón es de todos sus asociados (aragoneses y simpatizantes de Aragón): para su solaz y disfrute, relación social, añoranza, difusión y defensa de nuestra querida tierra. Esta es su política. Cualquier otra partidista (¿«Grupo de emigrantes» formando «rancho» aparte?) está de más. La Directiva de la Casa de Aragón (Madrid). ¿ Estudiantes gol pistas? Los alumnos progresistas asistimos, confusos e impotentes, a un ascenso impresionante del fascismo en los claustros universitarios. Lo sucedido en primero de Derecho — una clara mayoría del curso se pronunció sin titubeos a favor del «tejerazo» — no es, desgraciadamente, un hecho aislado. No valen en esta hora excusas, componendas ni seguir la técnica del avestruz. Los alumnos que asistimos con asiduidad a las asambleas de distrito (unos quinientos, en las ocasiones importantes, nunca más de mil) estamos empezando a cansarnos de oír siempre las mismas cosas, los mismos planteamientos, las mismas reivindicaciones. Creemos sinceramente que los delegados de curso marxistas, aun cuando sus gestiones han sido en muchas circunstancias francamente satisfactorias, equivocan su táctica frente a la gran masa silenciosa que constituye el cuerpo de casi todos los cursos. Nos cuesta creer que más de cien alumnos de Derecho se mostraran favorables al golpe de Estado. Su reacción se explica mejor si se analizan los intentos por parte de algunos alumnos, marxistas de corazón pero sin dos dedos de frente, de involucrar reiteradamente al curso en apoyo de los trabajadores de Nurel, del sector de la construcción, de huelgas por aquí, de paros simbólicos por allá, mañana lo del Salvador, pasado la solidaridad con el Vinader de turno, etc., sin comprender que el universitario de hoy se inclina más por las cuestiones prácticas de cómo aprobar un examen o cómo conseguir un puesto de trabajo, que por las empresas románticas y políticas. Todo ello tiene como consecuencia el hastío y cansancio por la «política», y el rechazo automático, no por razones ideológicas, sino por reflejos psicológicos, de todos los agitadores profesionales, la mayor parte de ellos, para qué lo vamos a negar aunque sean camaradas nuestros, muy malos estudiantes. De esta forma los fascistas, fuerzanovistas y demás ralea se presentan con la etiqueta de «estudiantes de orden, apolíticos y con deseos de estu¬ diar», y se están llevando poco a poco a todos los cursos de calle. Ello explica que en la Facultad tengamos un nazi de delegado de curso (caso probablemente único en las universidades europeas). Los jóvenes progresistas vemos cómo se nos escapa la oportunidad de oro de construir una Universidad democrática y pluralista. A todo lo dicho anteriormente hay que añadir que buena parte del profesorado, que en la incipiente democracia se había mantenido en una situación de discreto silencio en lo social y en lo político, sin duda alguna temerosos de que el entusiasmo de la nueva etapa que en España surgió a la muerte del dictador acabara con ellos, empiezan a liberarse de complejos y a manifestar públicamente sus ideas derechistas. Catedráticos como García Amigó, Murga o profesores como Maximiliano Bernad se declaran fachas, y lo cierto es que tienen ganada una merecida fama de personas competentes y serias, además de cierta simpatía con ei alumnado. Los profesores de izquierda, o se han quemado en política — el alumno comprueba a diario la incompatibilidad de la enseñanza y de la dedicación a la cosa pública, porque siempre acaba desatendiéndose la primera — , o les falta marketing como al camarada Lacasta, que se negó en rotundo a darnos clase por el motivo anteriormente mencionado del pronunciamiento del curso en favor de las bayonetas. Lo triste es que tengamos en el curso cien fascistas; hay que buscar la causa de esta triste situación y poner remedio. Ahora bien, hay que aceptar el hecho y ser consecuentes con él. La postura de Lacasta nos parece inadmisible a los alumnos de izquierda, puesto que si se pide al curso que se pronuncie sobre el tema y el resultado de la votación no se ajusta a nuestros criterios, la solución no está en ponernos a gritar o en adoptar posturas infantiles, sino en reflexionar en nuestros propios errores y hacer una autocrítica sincera de nuestras posiciones ideológicas. Con lo ocurrido en Derecho se ha demostrado que el movimiento estudiantil lo componemos quinientos tíos que actuamos como si representáramos a treinta mil. Y que, además, cuando la masa silenciosa se ve con la soga al- cuello, siempre se inclina por soluciones «de orden» (y todos sabemos de qué tipo de orden» se trata: la represión y la dictadura). Ana y Pilar. (Alumnas de Derecho. Zaragoza.) Andalón, 27 de marzo al 2 de abril de 1981