La semana de Andalán lúe) ñm )s f al s :m a, iciaj los a ios, ñ, 'zan )aja[ : ai íes ) Ri : ra íráfíco», que fueron anupor la audiencia ma'ña, y Pasó a desglosar ftérrnínos «capo», «trepa» jailarín de claqué», auténeje de todo el juicio, litio que el articulista hutenido un desliz en ito a la especialidad de de Sancho Oronda, que ia haber sido el tango, [ejemplo, pero que en ninf caso resulta injurioso juir una habilidad espeípara el baile en tiempos íuventud. En cuanto a lo krepa», señaló su sentido ico sociológico como perLje que asciende rápidafte en la pirámide social in sistema capitalista, y la expresión, en todo ca¡podría tener cierta ironía, Xca una carga injuriosa, itras «capo» es una palaque hay que entenderla lio un barbarismo que sig;a sólo jefe. . pretende ocultar el ver;ro interés de la querella, ló, por cuanto el quere|te se indigna más por [s simples calificativos que temas de fondo del arlo objeto de la querella. 10 fuera por la existencia [una prensa libre, no se cubrirían casos como los ÍMatesa, Reace, Lockheed, ■o hubieran tenido que di- iaso ;oricj n te os Hir presidentes como NiH o Leone, afirmó el letrala defensa para añadir lo que la querella indica el fondo es que la Caja tolera una prensa como ALAN a la que se quiere esta acción hacer desapar como única voz crítica la gestión de la entidad, izó sobre la petición de millones, en cuanto que enorme cantidad indicaría el honor de las personas Htría en relación directa a su patrimonio. Luis Saldaña p leiría pormenorizadamente las sentencias de la audiencia 11 madrileña en los juicios conm «Sábado Gráfico» por el 5 ID el , ^anto González Veguillas a ; -|a revista había señalado ™; manipulaciones de la Caja y rj simulación de un préstamo de , 75 millones entre otras cosas ini^BUe absuelta— y concluyó r c4 citas de autores cristiandk sobre la conveniencia de perdonar. ame: y £>■ ciudB omóH ideníH iñol^t C1UG orne: deii iñol hom Ima! sionfl espe -qi saci on ALA resii ría «E mim ; coll ; co jue I ;rep; o téi :ra la I nn: isore IdaS David y Goliat [ defensor de Pablo LaSfeñeta, el senador de ía ■UD Ramón Sainz de VaBida, comenzó su intervenBn considerando un honor defensa de ANDALAN por un calificado órgano de ■presión y defensa de Ara|n. Inmediatamente pasó a alar una grave falta de ma en la acusación, por mto recoge las expresiones >uestamente injuriosas en ■ seno de unas frases que ■j>erían haber sido objeto en todo caso de una querella por ■lumnias, no por injurias, ■ que de esta forma hubiera ■o posible pasar a probar ■veracidad de lo dicho por ■ÍDALAN. En cuanto inju~s, estas pruebas no son poples, lo que crea cierta inensión. «La acusación ha a lo anecdótico dejando lado lo esencial, cosa que deja obnubilado», diría, esaltó el carácter técnico la expresión «trepador sol>> recogida en el título de Prestigioso libro editado f ^mecé, de Buenos Aires, en el «Diccionario de Souogia» editado por el Fon- (Pasa a la pág. 10) Ante el silencio de los periódicos Andalán en las paredes El martes día 20, sólo unas horas antes de que la Sala de lo Criminal de la Audiencia Provincial de Zaragoza declarara abierto el juicio contra el director y otro periodista de ANDALAN, muchos zaragozanos que circulaban por la Plaza de España no daban crédito a sus ojos. A las ocho de la tarde, en la puerta de la Diputación, los máximos dirigentes políticos de la izquierda aragonesa voceaban y vendían a los transeúntes el número especial de nuestro semanario dedicado a informar de la querella interpuesta por el director general de la Caja de Ahorros. Era una muestra más de la impresionante solidaridad que la querella de Sancho Dronda había catalizado en torno a nuestro semanario. Confundidos entre el público que abarrotaba la amplia acera de la plaza, los tres diputados del PSOE, Angel Cristóbal Montes, Antonio Piazuelo y Rodrigo Benito, ofrecían a los vecinos de Zaragoza, al precio de 15 pesetas, el número extra de ANDALAN. En la misma acera, junto a la mesa instalada por todos los partidos, sindicatos y asociaciones vecinales de Zaragoza, Vicente Cazcarra, secretario general del PCE en Aragón; Javier Lázaro, secretario general del PTA; José Ignacio Lacasta, secretario general de MCA, y otros dirigentes del Partido Carlista, Partido Socialista de Aragón —su presidente, Emilio Gastón, -excusó su asistencia desde Madrid por su trabajo en la Comisión Constitucional— y otros partidos y sindicatos repartían folletos explicativos de la querella y vendían también el número extra. Las paredes de toda la ciudad, en esos momentos, se hallaban plagadas ya de carteles con la hucha-cárcel y el grito de «Libertad de expresión». Los demócratas se apiñan La más completa solidaridad de todas las fuerzas políticas, sindicales y ciudadanas de Aragón se produjo inmediatamente después de que Sancho Dronda presentase una querella por presuntas injurias graves, que el día 21 la Audiencia Provincial calificaría en sentencia todavía recurrible ante el Supremo como injurias leves. Lo que inicialmente se plasmó en un comunicado conjunto de diez partidos, seis centrales sindicales y la Federación de Asociaciones de Veciiuos de Zaragoza, fue cobrando mayor fuerza a medida que diversas mediaciones. para que Sancho Dronda retirara la querella, se fueron estrellando como contra un muro. ANDALAN, que era consciente, como las organizaciones que lo apoyan, de que el fondo de la cuestión para Sancho Dronda de ninguna manera es una serie de expresiones calificadas como injuriosas sino toda una actitud crítica ante la gestión de la Caja, estaba puesto a retirar los términos estrictos recogidos en la querella. Y no porque consideráramos que eran injuriosos —esperamos que el Tribunal Supremo los considere no delictivos y de ahí que se vaya a recurrir inmediatamente contra la sentencia de la Audiencia Provincial—, sino por dejar meridianamente claro que la actitud de ANDALAN no se ceba en las personas, sino que trata de llegar a las grandes cuestión nes de fondo. Las mediaciones no tuvieron el menor éxito. La sentencia de la Audiencia Provincial, que ANDALAN va a recurrir, no ha colmado las esperanzas de la dirección de la Caja de Ahorros, claramente expresadas por boca de su abogado al aumentar la petición de pena a 12 millones además del destierro. Fijada ya la fecha del juicio para el 21 de junio, ningún periódico ni emisora de Aragón —salvo la honrosa excepción del Diario de Teruel, «Lucha», se hizo eco de la noticia. Los aragoneses podrían no llegar a enterarse de que estaba en juego la supervivencia de ANDALAN. Los partidos, sindicatos y organizaciones ciudadanas creyeron llegado el momento de intervenir para hacer públicos los hechos y reclamar libertad de expresión. Con un exquisito cuidado por no interferir en la acción judicial que consideramos debe ser absolutamente libre e independiente de cualquier coacción, se trataba de romper el silencio de los medios de comunicación aragoneses. A tal fin se decidió la impresión de un número extraordinario y monográfico de ANDALAN, que con ocho páginas sería vendido por todo Aragón y la Rioja, al precio de 15 pesetas, por parte de los militantes de partidos y sindicatos, y que ANDALAN regaló a sus 4.500 suscriptores. Además, los partidos y organizaciones editarían 40.000 folletos explicativos de la querella, decenas de miles de carteles diseñados por el Colectivo Plástico de Zaragoza y miles de pegatinas con el mismo diseño y contenido. Durante todas estas semanas, no ha habido en Aragón acto público masivo de cualquier índole que no haya contado con la presencia de militantes de partidos y sindicatos que vendían y repartían este material. Numerosas mesas fueron instaladas en puntos céntricos de Zaragoza y otras localidades aragonesas para dar información de ía querella. Mientras, los partidos y sindicatos participantes en la campaña (AC, Asamblea de Cultura, Asociaciones de Vecinos, CC. OO., CNT, CSUT, ID, MCA, ORT, PCA, PCE, PSA, PSOE, PTA, SU, UGT y USO) se habían distribuido por sectores la ciudad de Zaragoza y toda la región parà fijar los carteles en favor de la «Libertad de Expresión». La respuesta de la Caja consistiría en una campaña de publicidad en todos los diarios en la que trata de explicar, en capítulos, los fines, el control y el destino del ahorro que tiene depositado. En días pasados, el director de ANDALAN ha debido prestar declaración en el juzgado de instrucción número 4 sobre los autores de dos trabajos aparecidos en el número extra editado por nuestro semanario: el editorial titulado «Nos quieren desterrar» y el artículo de página dos titulado «Goliat contra David». El fiscal del territorio, ha denunciado estos artículos ante el juzgado por considerar que podrían ser constitutivos de delito de coacción a la labor de la justicia. ANDALAN 7